La inflación acentuó su tendencia a la baja el mes pasado, después de que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) experimentara un salto del 25,5% en diciembre de 2023 y del 20,6% en enero de este año.
La inflación fue del 13,2% en febrero, por debajo de lo esperado por las consultoras privadas. El rubro de telecomunicaciones fue el que más subió, con un 24,7%, seguido por las tarifas del transporte, con 21,65, y las de electricidad, gas y agua, y los combustibles, con el 20,2%.
El dato se conoce luego de que en enero se registrara una suba del 20,6% y en diciembre, del 25,5%, la más alta desde marzo de 1990. Bebidas alcohólicas y tabaco subieron 17,7%; bienes y servicios, 16,6%; y salud, 13,6%. Los alimentos y bebidas alcohólicas (11,9%), educación (9,9%) y prendas de vestir y calzado (7,2%) quedaron por debajo de la media mensual.
Antes de que se publicara la cifra, el presidente Javier Milei había afirmado que continuaría la tendencia a la baja que había comenzado el mes pasado: “Parece que está debajo del 15%, con lo cual es un numerazo”, enfatizó el mandatario, quien sin embargo reconoció que tiene “plena conciencia de lo que está pasando” en el país “pero corregir cien años no es gratis”.
También vaticinó que en los próximos meses la inflación podría llegar a un dígito: “Si le sumás la suba de prepagas, que es de una vez, y tarifas, que son una vez para siempre, en ese contexto, al número le vas a tener que restar casi 5 puntos, cuando veas eso, vas a hablar de una inflación de un dígito”.
De cara a los próximos meses, un informe de la consultora EcoGo estimó que las tarifas de luz, gas y transporte público (trenes y colectivos), junto a los precios de los combustibles y las cuotas de las prepagas sumarán unos 11,5 puntos porcentuales a la inflación del trimestre marzo-mayo.
Entre el 18% y el 30% del número de inflación de los primeros cinco meses del año estaría explicado por la incidencia de estos precios regulados, proyectó la entidad dirigida por Marina Dal Poggetto y Sebastián Menescaldi.