En un hecho ocurrido recientemente en Deán Funes, una mujer de 49 años logró salvar la vida de su hijo de 2 años tras recibir asistencia telefónica por parte de operadoras del 911. El pequeño presentaba signos de ahogamiento luego de haber ingerido golosinas.
Gracias a la contención y guía brindada por el Centro de Comunicaciones, la madre pudo ejecutar correctamente las maniobras indicadas, logrando desobstruir las vías respiratorias del menor. Posteriormente, el niño fue trasladado por un servicio de emergencias desde su domicilio, ubicado en calle Ricardo Güiraldes, hacia el hospital local para una mejor valoración médica.
Este hecho destaca el rol clave del sistema de emergencias y el profesionalismo de las operadoras que, con su rápida intervención, marcaron la diferencia entre la vida y la muerte.
¡Felicitaciones por su desempeño a las efectivas Natalia Moyano y Micaela Farias!
