Ante el faltante de en el mercado en medio del furor por completar el álbum, un kiosquero cansado de que entren a preguntar si “tiene las figuritas” optó por escribir cartelitos en 17 idiomas de que NO TIENE FIGURITAS DEL MUNDIAL. Los clientes tomaron fotos, las publicaron en redes y su pérdida de paciencia se viralizó.
