Al menos así lo manifiestan desde el punto de vista gastronómico y organizadores de eventos.
Luego de cuatro días no laborables y a pesar de que muchos optaron por otros destinos para disfrutar el finde largo, Deán Funes registró un buen número de visitantes y actividad económica. Tanto así que por ejemplo, después de bastante tiempo, se debió esperar a que se desocupen mesas para poder cenar. Colapsos que por supuesto son bienvenidos después de haber esperado meses para repuntar en ganancias.
Hubo opciones para todos los gustos, boliches, ferias, fútbol, rally, shows y además eventos privados que celebraron acontecimientos importantes.